lunes, 30 de noviembre de 2009

Oso Rosello


Oso querido, no escribi antes porque no podia, la verdad. Tan shokeante y repentina fue tu partida. Tan fuerte el vacio. Las cosas, como todo, con el tiempo se van "acomodando". Tu ausencia, sin embargo, dolera para siempre. Si, se que andas por aca, cerca de la gente que te quiere mas que nunca. Tu familia, aquellos compañeros tucumanos y de tantas otras partes. Todos te invocamos en una sonrisa, un chiste, una alegria, porque sos eso, sos la alegria que nos acompañara siempre.
Un abrazo grande, hermano.
Ya nos encontraremos.
Por el momento un hasta siempre y GRACIAS tu luz.

(Foto del sitio www.amaliovilla.com)